Ciudad de México, 23 marzo 2025.- El papa Francisco saluda a más de 3 mil personas desde el balcón del Hospital de la Policlínica Gemelli, antes de ser dado de alta.
Después de treinta y ocho días que estuvo internado se asomó al balcón para dirigir unas breves palabras “Gracias a todos”, dijo con voz débil, antes de bendecir a los fieles ahí reunidos.
En un gesto de agradecimiento quiso salir a los devotos que hicieron una cadena de oración durante estas jornadas donde hubo preocupación por su salud. Además, dirigió su mirada hacia la señora Carmela Mancuso, de 72 años, que estaba en primera fila, con un ramo de flores amarillas en la mano, quien acudió al nosocomio casi todos los días desde hace más de un mes. Entre aplausos y gritos de “Viva el Papa”, la señora Carmela, agradeció por inclinó la cabeza y mientras le rodaban lágrimas por su rostro. “No sé qué decir. Gracias, gracias, al Señor y al Santo Padre. No me creía tan ‘vista. El tenía que dar la bendición y en cambio vio mi manojo de rosas. Le deseo una pronta recuperación y que vuelva como antes entre nosotros, finalizó.
El papa mejoró y está en casa. Gracias a Dios.