Paula Ruiz
Agencia Reforma
Monterrey, NL 12 abril 2024.- Más
allá de lo que el público ve a través de la televisión o cuando lo escucha en
la radio, a Faisy le encanta hacer teatro porque se muestra tal como es, al
«desnudo».
El actor está de regreso en tierras regias
junto a los actores Paco Rubio, Alejandra Barros y Mariazel, porque juntos se
encerrarán hoy por una hora y media en un Escape Room, que se presenta hoy con
dos funciones, a las 17:30 y las 20:00 horas, en el Auditorio San Pedro.
«De todos los proyectos que hago, el
teatro es mi terapia porque el teatro me salva, el contacto directo con el
público me inyecta vitalidad, además, creo que la gente se puede dar cuenta de
quién realmente soy, más allá de cómo me escuchan en radio y me ven en tele
(Faisy Night). Me gusta que la gente vea a un Faisy diferente», expresó el
conductor de Me Caigo de Risa.
Escape Room es una comedia que mezcla
suspenso, drama y hasta terror, en la que los cuatro actores enfrentarán una
carrera contra el tiempo porque sus personajes tienen una hora para resolver
los acertijos y poder escapar de esa misteriosa habitación.
«Te lo juro, agradezco estar en esta
obra, es mi cardio del mes, no necesito ir al gimnasio, esto me mantiene
flaquito, con condición porque es demasiado demandante», comentó Faisy.
Su compañero Paco Rubio, al igual de Faisy,
también termina agotado después de una función de hora y media en la que todo
es acelere.
«Es una de las obras más demandantes que
yo he hecho, te lo juro. Ni en Mamma Mía!, en la que también actúo, termino así
de cansado. Es una hora y medio sin descanso. Los cuatro actores estamos en una
constante tensión», expresó Rubio.
Después de cada función, cuando llega a su
casa, lo primero que hace Faisy es tomarse un agua mineral con limón porque se
siente deshidratado y agotado.
Para quitarse el acelere, dijo, se poner a ver
televisión y termina durmiéndose entre las 2 o 3 de la mañana.
Rubio, por su parte, tiene como rutina llegar
a su casa, donde vive con su madre, y sacar a su perrita a pasear.
«Todo eso me va calmando poco a poco,
dejo que me llegue el sueño solito», contó.